Gatos en el tejado.

Estaba el Señor Don Gato sentadito en su tejado cuando recibió una carta por si quería ser casado con una gatita blanca, sobrina de un gato pardo. Y el gato emocionado por ir a verla se cayó del tejado, se rompió seis costillas y la puntita del rabo. Pobre gato…

Toda una vida esperando el amor y un tropiezo se lo araña cuando ya lo sentía tan cerca. ¿Y si le damos otra oportunidad? Y si el amor, como nuestro gato, ¿tiene siete vidas? ¿Y si tenemos que caer del tejado para darnos cuenta de cuánto duelen los reveses?

Que los cuentos de hadas no existen y las rosas sin espinas ni siquiera tienen olor. Que esto no es fácil, pero seguro merece la pena. Que las heridas que no sangran son las que más nos enseñan. Que la vida hay que vivirla, y que se callen los de allá fuera.

Que las decisiones nunca son incorrectas y que volver a empezar está permitido. Que el triunfo se sobrevalora y el fracaso se magnifica. Que ni tanto ni tan calvo. Que a ratos me gusta quererte y otros sólo me dejo querer. Que yo decido cuándo y dónde, y esas intenciones no me van a doler.

Que un día fui la gata de tu carta y aunque ni triste ni azul, tú también fuiste mío. Y eso nunca se olvida. Que seguimos siendo los mismos gatos bajo la lluvia buscando refugio en cada tejado. Que siempre sabemos dónde estamos y nos reconocemos al anochecer cuando maullamos. Que nunca nos evitamos.

Que el amor nos araña y nos cela. Nos espía tras las cortinas y desaparece sigiloso pero siempre nos mira. Y a veces, misterioso, retorna. Que acecha suavemente la caída y el error pero revive con furia de nuevo en una llama. Que somos puramente felinos, que nada nos cambia.

Que reñimos como gatos para lamernos las heridas. Que ansiamos ronroneantes infinitas caricias. Que nos gusta juguetear con nuevas garras hasta quemarnos la piel si hace falta. Pero al final siempre regresamos al mismo lado. Y aunque a veces lleguemos heridos, confusos y desubicados, todavía nos necesitamos.

Porque nadie me hace maullar como tú, ni existe mejor lugar que tu tejado.

Autor: Cristina CG

(De)formación periodista, me cubro y descubro según las circunstancias. Acumulo vivencias y archivo recuerdos. Tropiezo, caigo, escribo y me levanto. CRISTINA CG.

Un comentario en “Gatos en el tejado.”

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: